Mujer H'Mong (VIETNAM)
La etnia H´Mong es la más numerosa del distrito de Sapa, en las montañas situadas en la zona norte de Vietnam. Concretamente, el pueblo de Sapa, es un lugar lleno de hoteles al que se acercan muchos turistas para pasear, ver alguno de los campos de arroz situados en las laderas abruptas bañadas por el sol y comprar algún objeto de artesanía a alguna de las mujeres que se distinguen por el pañuelo tradicional con el que cubren su cabeza.
Sin embargo, fuera de Sapa se extiende una red de pequeñas aldeas dominadas por las etnias que habitan el valle o las zonas de montaña. Allí la vida es diferente. Sólo algunas mujeres realizan piezas de artesanía para llevarlas a la ciudad y el modo de vida y las tradiciones de cada etnia dominan el día a día.
Es muy habitual encontrarse a mujeres trabajando los campos, o en la ruda haciendo un telar. En el campo, frente a las necesidades, los roles de género se igualan más.






ETNIA H’MONG EN VIETNAM
En las montañas del norte de Vietnam, donde las brumas envuelven los picos de Sapa y los valles de Ha Giang, viven los H’Mong, uno de los grupos étnicos más importantes de Vietnam. Los H’Mong son un grupo de origen sino-tibetano que, según los estudios históricos, emigró desde el sur de China hacia las tierras montañosas de Vietnam, Laos, Tailandia y Myanmar hace más de 300 años. Desde entonces, se asentaron en las altitudes elevadas del norte de Vietnam, desarrollando una economía de subsistencia basada en la agricultura, especialmente el cultivo del arroz y el maíz en terrazas que desafían la gravedad de las montañas.
Durante la colonización francesa y más tarde durante la Guerra de Vietnam, la comunidad H’Mong fue conocida por su valentía, tanto en su lucha por la autonomía como en la resistencia a las potencias coloniales y conflictos externos. En la actualidad, aunque enfrentan desafíos sociales y económicos, los H’Mong siguen siendo una comunidad robusta que se adhiere a sus valores y prácticas ancestrales.
CULTURA Y ESPIRITUALIDAD
El mundo de los H’Mong está íntimamente ligado a la naturaleza. Su espiritualidad se basa en un sistema de creencias animista. Las montañas, los ríos y los bosques no solo son recursos naturales, sino entidades sagradas que requieren respeto y rituales. Cada año, los H’Mong celebran festividades relacionadas con la agricultura, como el Tết Nguyên Đán, el Año Nuevo Lunar, que también marca el fin de la cosecha, y otros ritos para honrar a los espíritus protectores de los cultivos y del hogar.
Además de sus creencias espirituales, la comunidad H’Mong es conocida por su habilidad en la artesanía textil. Las mujeres en particular han mantenido viva una tradición de batik (técnica de teñido) y bordado intrincado, creando los distintivos trajes coloridos que los H’Mong visten en sus festividades y ceremonias. Estos trajes, con patrones geométricos y motivos simbólicos, hablan sobre historia y mitología.
EL ROL DE LAS MUJERES
Desde temprana edad, las niñas aprenden sobre agricultura, costura y tejeduría, labores fundamentales para el sustento de sus familias. Mientras los hombres sostienen posiciones de liderazgo y se dedican a trabajos pesados y al comercio, las mujeres son responsables de la mayoría de las tareas agrícolas y del hogar. Su conocimiento de las plantas medicinales y las técnicas de cultivo es profundo, lo que les permite no solo mantener a sus familias, sino también transmitir este saber a las futuras generaciones.
El matrimonio en la cultura H’Mong es a menudo acordado y forzado. Tradicionalmente, el «robo de novia» ha sido una práctica común, en la que un joven secuestra a la mujer que desea desposar con la aprobación de su propia familia (práctica muy similar a la de los casamientos mongoles). La mujer se ve presionada a aceptar la situación, ya que la cultura H’Mong valora enormemente el honor de la familia y la continuidad de las costumbres ancestrales. Aunque estas prácticas han disminuido en los últimos años debido a la modernización y la influencia de las leyes vietnamitas, todavía forman parte del imaginario cultural H’Mong y revelan las complejidades del género en esta sociedad.
Una vez casadas, las mujeres están en una posición vulnerable ya que la violencia de género es un problema significativo. Según diversos informes de ONGs y organismos como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) se ha identificado la violencia de género como un problema persistente en las comunidades minoritarias de Vietnam. El aislamiento geográfico y el desconocimiento de las leyes vietnamitas sobre derechos de las mujeres también perpetúan estas formas de violencia.
A pesar de los desafíos que enfrentan, como la falta de acceso a educación y servicios de salud en muchas regiones montañosas, las mujeres H’Mong son las principales transmisoras de la cultura. Su destreza en la producción textil no solo preserva técnicas ancestrales, sino que también se ha convertido en una fuente importante de ingresos mediante la venta de textiles en mercados locales y el turismo. De esta manera, las mujeres no solo mantienen viva la identidad H’Mong, sino que también impulsan la sostenibilidad económica de sus comunidades.
DESAFÍOS CONTEMPORÁNEOS. EL FUTURO DE LOS H’MONG
La globalización, el turismo y las políticas gubernamentales que fomentan la integración cultural han introducido tensiones en su modo de vida tradicional. Mientras que algunas comunidades han sabido aprovechar el turismo para comercializar su arte textil y mostrar su cultura al mundo, otras han experimentado la erosión de sus prácticas culturales y una creciente dependencia económica de las actividades turísticas.
Las mujeres, a pesar de su papel central en la familia y la comunidad, siguen enfrentando barreras significativas, incluidas limitadas oportunidades educativas y matrimonios tempranos. Sin embargo, muchas jóvenes H’Mong están rompiendo con las normas tradicionales, buscando acceso a la educación superior y explorando nuevas oportunidades laborales fuera de las montañas.
A medida que los H’Mong navegan por este mundo en rápida transformación, las mujeres, como guardianas de las tradiciones y agentes de cambio, jugarán un papel crucial en la forma en que su cultura evoluciona y se adapta. Su resistencia y capacidad para mantener vivas sus costumbres, al tiempo que se enfrentan a los desafíos del presente, es un testimonio del poder de la cultura H’Mong para perdurar y prosperar en un mundo moderno.
INDICADORES DE VIETNAM
Vietnam es una nación del sudeste asiático que ha experimentado una rápida transformación económica en las últimas décadas, pasando de ser una economía agraria a una de las economías emergentes más dinámicas de la región. Sin embargo, pese a su crecimiento económico, Vietnam enfrenta desafíos en términos de desigualdad, acceso a servicios básicos y equidad de género. A continuación, presentamos un análisis más detallado de los principales indicadores económicos, sociales y de género del país.
1. Indicadores Económicos World Bank
PIB (Producto Interno Bruto): En 2023, el PIB de Vietnam se estimó en US$ 413 mil millones, con una tasa de crecimiento proyectada del 6.3% para 2024 . La economía vietnamita está impulsada por sectores como el manufacturero, la agricultura y el comercio internacional, particularmente con la exportación de productos electrónicos, textiles y calzado. A pesar de la pandemia de COVID-19, el país ha logrado mantener un crecimiento estable, aunque enfrenta desafíos globales como la inflación y la disminución de la demanda externa.
Pobreza: La tasa de pobreza en Vietnam ha disminuido significativamente en las últimas décadas, cayendo al 4% en 2022. Sin embargo, persisten disparidades notables entre las áreas urbanas y rurales, así como entre diferentes grupos étnicos. Las zonas montañosas del norte y el centro del país son las más afectadas por la pobreza.
Desempleo: La tasa de desempleo en Vietnam es relativamente baja, situándose en torno al 2-3%. No obstante, el desempleo juvenil sigue siendo una preocupación clave, ya que muchos jóvenes luchan por encontrar empleos en sectores formales y de alta calidad.
Inflación: En 2023, la inflación en Vietnam fue del 3.2%, influenciada principalmente por el aumento de los precios de alimentos, combustibles y la fluctuación de la demanda internacional. El país ha logrado mantener una inflación relativamente baja en comparación con otros países de la región, aunque sigue vigilante ante posibles aumentos.
2. Indicadores Sociales UNDP – Human Development Reports
Esperanza de vida: La esperanza de vida en Vietnam ha mejorado significativamente, alcanzando los 75 años en 2023 . Este aumento se debe en gran parte al acceso mejorado a la atención médica y los avances en salud pública. Sin embargo, las disparidades en el acceso a los servicios de salud entre áreas urbanas y rurales persisten.
Tasa de mortalidad infantil: En 2022, la tasa de mortalidad infantil fue de 16 muertes por cada 1.000 nacidos vivos. Aunque Vietnam ha logrado importantes avances en la reducción de la mortalidad infantil, persisten desafíos relacionados con el acceso a la atención prenatal y postnatal, especialmente en áreas rurales y remotas.
Acceso a la educación: La tasa de alfabetización en Vietnam es alta, superando el 95% . La educación básica es universal y gratuita, lo que ha contribuido a una alta tasa de matrícula en las escuelas de primaria y secundaria. Sin embargo, la calidad de la educación varía considerablemente entre áreas urbanas y rurales, y el acceso a la educación terciaria sigue siendo desigual, con una marcada diferencia entre los géneros.
3. Indicadores de Género World Bank UN Women – Gender Equality in Vietnam
Desigualdad de género: Vietnam ocupa el puesto 65 en el Índice de Desigualdad de Género del PNUD . A pesar de los avances en la participación de las mujeres en la fuerza laboral, las mujeres continúan enfrentando barreras significativas, particularmente en términos de acceso a posiciones de liderazgo y la brecha salarial se mantiene alta.
Violencia de género: La violencia de género, especialmente la violencia doméstica, sigue siendo un problema persistente en Vietnam. En 2022, se reportó que aproximadamente 1 de cada 3 mujeres ha experimentado violencia física o sexual en algún momento de su vida. El gobierno ha implementado políticas para combatir este problema, pero las normas sociales y culturales aún dificultan un progreso sustancial.
Maternidad infantil y matrimonio precoz: Vietnam ha logrado avances en la reducción de la maternidad infantil, con una tasa de fecundidad adolescente de 29 nacimientos por cada 1.000 adolescentes. Sin embargo, el matrimonio precoz sigue siendo una preocupación, especialmente en áreas rurales y entre grupos étnicos minoritarios.
Participación política de las mujeres: Las mujeres en Vietnam han logrado cierta representación política, ocupando alrededor del 30% de los escaños en la Asamblea Nacional. Este avance refleja los esfuerzos del gobierno para promover la igualdad de género en la política, aunque las mujeres aún enfrentan barreras para acceder a cargos de liderazgo a nivel local.
Vietnam ha experimentado un crecimiento económico sostenido, acompañado por mejoras en la educación y la salud. Sin embargo, las disparidades de género, el desempleo juvenil y la pobreza rural siguen siendo desafíos importantes para su desarrollo inclusivo.